Mamás
guerreras. Poco se ha habado de aquellas personas encargadas de alimentar a
decenas y cientos de manifestantes, en las continuas protestas.
En
Lima, por ejemplo, un grupo de combativas madres de Ande – provenientes del Sur
– fueron las encargadas de preparar los alimentos por turnos. No obstante, esto
no hubiera sido posible sin las donaciones de los connacionales de la sierra
Sur y de la misma capital.
A pesar de los hostigamientos y represión de las fuerzas del orden, estas madres luchadoras se mantienen firmes y de pie. Ellas combaten la dictadura desde los fogones.